UX Research en acción: por qué entender al usuario cambia todo

Elaborado por: Mercedes Máspero, Colaboradora de Potencia Research.

Vivimos en un mundo atravesado por aplicaciones. Hoy, casi todo lo que hacemos implica usar una: esta mañana leí el diario desde una app, pedí un Uber, hice una transferencia, revisé LinkedIn e incluso reservé mi clase de yoga, todo desde diferentes aplicaciones.

Las apps pueden ser grandes facilitadoras o convertirse en una fuente de frustración. Todo depende de cómo estén diseñadas. Pero no se trata simplemente de buen o mal diseño en términos absolutos: lo que importa es si ese diseño se adapta o no a las necesidades del usuario.

Cada persona es diferente. Las necesidades pueden variar según su edad, su nivel de familiaridad con la tecnología o si presenta alguna discapacidad visual, auditiva o cognitiva. Un mismo diseño puede ser intuitivo para algunos e inaccesible para otros.

En un mundo donde las aplicaciones median cada vez más nuestras acciones cotidianas, desde pagar una cuenta hasta pedir comida o tomar un transporte, el diseño importa. Mucho. Y para que ese diseño realmente funcione, primero hay que entender a las personas que lo van a usar. Ahí es donde entra la investigación, o UX Research: la clave para crear experiencias centradas en quienes las viven.

Cuando una súper app se vuelve demasiado: el valor del UX Research

Hace unos años trabajé con un cliente que había lanzado una app interna a nivel global, pensada para mejorar la comunicación entre empleados de distintos países. El proyecto de investigación fue extenso, pero hubo un insight que resumió gran parte del problema: el equipo de diseño era chino, y la app debía ser usada en todo el mundo.

Esto puede parecer un detalle menor, pero no lo es. En China, las aplicaciones suelen integrar muchísimas funciones en un solo lugar. En lugar de tener una app distinta para cada necesidad —como solemos hacer en Occidente—, allá prefieren una única plataforma que concentre todo. Y eso fue, justamente, lo que construyeron: una especie de «Facebook corporativo», que también servía para pedir vacaciones, reservar salas, cargar gastos, etc. Una súper app.

Para los empleados en China, esto resultaba lógico y eficiente. Pero en otras regiones, incluso tratándose de una empresa tecnológica, generaba confusión y resistencia. La sobrecarga de funcionalidades en una sola interfaz resultaba abrumadora para muchos.

Un detalle fascinante —y revelador— sobre este caso fue el tema del color rojo. Algunos números importantes dentro de la app aparecían en rojo, lo cual, en el contexto chino, tiene una connotación positiva: el rojo es el color de la suerte. Incluso en la bolsa de valores china, cuando las acciones suben, los números se muestran en rojo. En cambio, en Occidente, el rojo suele asociarse con peligro, error o pérdida. 

La moraleja es clara: la usabilidad de una app no depende solo de su estética o funcionalidad, sino, sobre todo, de cuánto entendemos a quienes la van a usar. Conocer al usuario no es un paso más del proceso: es la base sobre la que se construye un buen diseño.

¿Estás diseñando una app o página  y querés que funcione de verdad?

Detrás de cada app hay personas reales, con contextos, hábitos y necesidades distintas. Lo que para unos es intuitivo, para otros puede ser una barrera.

Por eso hacemos UX Research: para conocer, escuchar y traducir esa comprensión en decisiones de diseño que realmente funcionen.

Escribinos y pensemos juntos cómo mejorar o crear la app que tus usuarios necesitan.